martes, 20 de marzo de 2012

Pan de molde

Cuando yo era pequeña el pan de molde se llamaba "pan Bimbo" y, al menos en mi casa, no era el pan que solía haber a diario. Lo que sí había siempre era el pan normal, que en mi casa tampoco era lo más normal, pues comíamos chuscos en vez de barras. Los chuscos eran el pan que llevaban a los cuarteles para la comida de los soldados, y estaban buenísimos. Eran panecillos pequeños, y si no recuerdo mal, 3 chuscos en fila medirían de largo más o menos como una barra. Hoy en día, en cambio, creo que en casi todas las casas hay un paquete con pan de molde, aunque sólo sea "por si se nos acaba el pan".

Pan de molde

Recuerdo que mis hermanos y yo de pequeños estábamos deseando celebrar algún cumpleaños, o que nos invitaran a alguno, porque los bocadillos siempre eran con pan Bimbo y estaban buenísimos y ¡tan blanditos!... ¡Bocadillos de pan Bimbo, tarta y chocolate!. Y para beber fantas y coca colas, que tampoco se solían tomar a diario.

Ahora en los cumples lo más importante son las chuches. Los niños, por lo menos los de la edad de los míos, entre 3 y 6, pasan de los bocatas y a la tarta tampoco le hacen demasiado caso. Las bebidas sí que siguen gustando igual, y eso que ahora también es habitual tomarlas cualquier día aunque no sea especial, y es que el azúcar y los colorantes tienen su cosa...

A mi me gusta tener siempre pan de molde en casa. Me gusta alternarlo con el pan de hogaza para hacerme tostadas para el desayuno, y reconozco que los niños también lo toman mejor por ser más blandito. Así que tanto si lo queréis para desayunar, como para los bocatas de un cumple o  para que lo tomen los niños, aquí os dejo la receta del  pan de molde que yo suelo hacer para que lo tengáis siempre en casa :). En cuanto a las chuches y las bebidas gaseosas, eso sí, mejor dejarlas para las ocasiones ¡ja, ja, ja!.

Pan de molde

Este pan de molde es sin duda el que más me gusta de todos los que he hecho hasta ahora, por su textura, su aspecto, lo que dura, y por supuesto, por lo fácil que es de hacer gracias a la técnica de "no amasar".  La receta la he sacado del libro de Dan Lepard, "Hecho a mano", aunque yo la he modificado un poco, añadiendo  masa madre.

Ingredientes:

250 g de harina floja
250 g de harina de fuerza
5 g de levadura prensada
300 ml, aproximadamente, de leche entera templada
10 g de sal
20 g de sirope de agave
25 g de mantequilla derretida
150 g de masa madre (preparada con 80 g de leche entera, 80 g de masa madre  y 60 g harina de fuerza)

- Realizamos un primer refresco de la masa madre con agua y harina. Una vez que nuestra masa está con burbujas, tomamos unos 80 g de ésta y los mezclamos con 80 g de leche y 60 g de harina. Cuando vuelva a estar con burbujas ya la tendremos a punto para la masa del pan.

- Entonces mezclamos la levadura con el sirope y con unos 20 ml o así del total de leche.
Sobre esto añadimos las dos harinas, la masa madre y la sal y a continuación le añadimos poco a poco el resto de leche, amasando hasta mezclar bien todo. La masa quedará pegajosa, pero es importante echar la leche poco a poco, para controlar que no nos pasamos de cantidad y que no nos quede una masa demasiado blanda. A veces dependiendo del tipo de harina usado o de otros factores puede ocurrir que con menos de 300 ml de leche sea suficiente. 

- Cuando esta masa esté más o menos homogénea añadimos la mantequilla. Amasamos y dejamos reposar unos 10 minutos tapándolo con film de cocina. Untamos aceite sobre la superficie de amasado  y sobre nuestras manos y volvemos a amasar durante unos 10 segundos. Colocamos la masa en un bol untado también con aceite y dejamos reposar otros 10 minutos. Volvemos a repetir este proceso de amasado y reposo otras dos ó tres veces y finalmente dejamos la masa reposando durante una media hora.

- Después de este tiempo estiramos la masa, le damos forma más o menos rectangular, y enrollamos uno de los extremos sobre sí mismo formando un cilindro (como si hiciéramos un brazo de gitano). Apretamos un poco la masa en los extremos para sellarlos y lo introducimos en un molde que previamente habremos engrasado. Dejamos la masa que fermente hasta que más o menos duplique su volumen tapando el molde con film, que antes habremos untado también con aceite para que al subir la masa no se le pegue.

- Tras la fermentación lo horneamos en un horno precalentado a 210ºC. Lo dejamos a esa temperatura entre 5 y 10 minutos y después la rebajamos a unos 180ºC durante otros 25 o 30 minutos, como siempre dependiendo de cada horno. Si vemos que se nos oscurece mucho por arriba pero que aún no está cocido podemos poner por encima del pan una lámina de papel de aluminio.

- Y para rematar, cuando el pan se haya cocido lo sacamos del horno y desmoldamos sobre una rejilla, lo pintamos por encima con leche, para darle un poco de brillo y dejamos que se enfríe.

Pan de molde

Sugerencias y curiosidades:

- este pan lo podéis guardar en una bolsa, por ejemplo de un pan de molde que hayáis comprado en otra ocasión, y os aguanta perfectamente una semana fuera del frigorífico. La masa madre ayuda a su conservación y a que no aparezca moho.

- los tiempos e intervalos de amasado no pasa nada si no los cumplís a raja tabla. Es decir, pueden ser 15 ó 20 segundos de amasado, y además si os descuidáis y pasan 20 minutos entre dos amasados en vez de 10 os saldrá bien igualmente

- si no tenéis sirope de agave podéis añadir la misma cantidad de azúcar. El sirope de agave es un endulzante natural, apto para diabéticos, que se extrae de las agaváceas o pitas, una familia de cactus que se parecen al aloe. El zumo de esta planta se puede tomar, pero lo que se comercializa es como una miel, que se obtiene cuando se calienta el zumo hasta que los hidratos de carbono complejos se transforman en fructosa y el zumo espesa. Tiene un sabor neutro y un índice glucémico bajo (15), es decir, se transforma en glucosa lentamente.

- también podéis cambiar la mantequilla por aceite de oliva virgen extra, aunque para mi gusto la mantequilla le pega más, y en cuestión de calorías ya sabéis que cambiar una cosa por otra no va a influir, pues aportan las mismas calorías por gramo

- podéis hacer este pan sin masa madre, para ello deberéis añadir 10 g de levadura prensada, o también con una masa madre normal, hecha con agua en vez de leche

- este pan no es adecuado para bebés menores de un año, ya que lleva leche y mantequilla, y los lácteos es mejor no introducirlos hasta el año de edad por su potencial alergénico. Además para los bebés es mejor un pan algo más duro para que lo puedan ir chupando.
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...