Estos días están siendo un poco complicados. Siempre lo son cuando hay que adaptarse a una nueva rutina, y ahora, con las vacaciones de los niños toca hacerlo.
Hay que coger un nuevo ritmo, y nuevo horario, y al principio no sé porque todo se lía. La intención es que los niños se sigan acostando a la misma hora, y levantándose si puede ser algo más tarde. Pero al final toooodo es más tarde: se levantan más tarde, se acuestan más tarde, comen más tarde, cenan más tarde. No sé si sólo me pasa a mi, pero eso de saber que al día siguiente no hay cole hace que me relaje y que tarde más en todo.
Pero tengo que intentar recuperar los horarios normales, porque ese ratito que pasa desde que los niños se acuestan hasta que nos acostamos los mayores a mi me da mucho de sí, y si se me acorta el ratito se me acorta también todo lo que hago durante ese tiempo.
Y para muestra de cómo aprovecho esos momentos de calma os dejo aquí este colgante de ganchillo:
No es porque lo haya hecho yo, pero es precioso, y ahora que el tiempo nos permite ir sin chaqueta ni abrigo podemos lucirlo en condiciones.
La idea la saqué de unos fascículos que tengo de labores de ganchillo. No os pongo el esquema, porque no venía. Estaba explicado con palabras y me costó horrores entender la dichosa explicación. ¡Qué les costará poner un diagrama! ¡Con lo bien que se entienden!
Está hecho con el mismo hilo que empleé en mis joyas de ganchillo, FIL ARGENT DMC A BRODER, plateado, composición: viscosa 72 %, plata 0,1 % y poliester 27,9 %, y un ganchillo del número 11.
Si os fijais en la foto y sois un poco manitas no creo que os cueste hacerlo. Se empieza por los cuadrados del centro, ya sabéis, pilares y cadenetas. Cuando están los 9 cuadrados los rodeamos con una vuelta a punto bajo, pero si os dais cuenta, en cada lado del cuadrado en el centro hay un anillo que se hace montando 5 puntos de cadeneta. Se cierra el anillo y después se hacen en él dos puntos bajos, un piquito, dos puntos bajos, piquito, 2 p. bajos, piquito y 2 p. bajos.
Después se hace otra vuelta: si partimos de la esquina superior derecha, hacemos un punto bajo, 4 p. de cadeneta, 1 p. bajo en el primer piquito siguiente, 8 cadenetas, 1 punto bajo en el tercer piquito siguiente, 4 cadenetas, y así hasta terminar toda la vuelta. Es decir, entre dos piquitos 4 cadenetas, y en el resto 8.
Después los semicírculos. Como veis son varias vueltas en las que se rellena el arco de las esquinas primero con puntos bajos, y después con pilares, separados en una vuelta por una cadeneta, y en la siguiente por 2.
Para teminar el corazón, se hace alrededor de él una vuelta trabajando 2 puntos bajos, 1 piquillo, 2 p. bajos, piquillo, y así hasta terminar.
Y para rematar la labor hacemos la cadena y los 3 rabillos que cuelgan en la parte inferir del corazón. Para ello he hecho una cadeneta con dos hebras, primero hago una cadeneta con una hebra, después con la otra, y así alternativamente. En la cadena cada cierta distancia introduje cuentas metálicas, y lo mismo hice en los rabillos colocando las mismas cuentas como remate final. De este modo le damos más cuerpo y más peso al corazón, para que quede un colgante que de verdad cuelgue.
Espero que os haya gustado y ya me contaréis si os habéis animado a hacerlo ;)